Se hace millonario vendiendo la ropa que tenía guardada “para cuando baje cinco kilitos”

Vivimos en tiempos en los que es difícil satisfacer los cánones estéticos que nos rigen y eso resulta frustrante. Oh, sí. Vaya si es así.
Pero algunas veces ganan los buenos: Steve Henao, panadero de Manizales, Colombia, dedicó su vida a conseguir el cuerpo que siempre soñó. Cansado de fracasar en su intento, cambió defecto por virtud y triunfó: juntó la ropa que tenía «para cuando baje cinco kilitos», la vendió y con las ganancias hoy es accionista minoritario de Google.
«Los quiero ver ahora a todos los que se reían del gordito, jeje», dice orgulloso y altanero: «¡qué van a decir! Gordito pero me importa poquito, tengo más guita que todos ellos juntos, no habré estado a la altura de las exigencias de belleza occidentales pero sí de las económicas, cago oro y ahora que hagan todos fila para chuparme la pija, dicho esto con respeto, porque en mi casa me enseñaron a ser educado».
«¡qué van a decir! Gordito pero me importa poquito, tengo más guita que todos ellos juntos, no habré estado a la altura de las exigencias de belleza occidentales pero sí de las económicas, cago oro y ahora que hagan todos fila para chuparme la pija, dicho esto con respeto, porque en mi casa me enseñaron a ser educado»
Steve Henao, panadero de Manizales
Parece que para este emprendedor solo el cielo es el límite: «soy una versión moderna del self-made man», dice, y confirma los rumores sobre su futuro: «en una de esas me viene la viaraza y me tuneo todo, encima de rico quedo flaco, ¿te imaginás? jajajajaja, vamo a ver qué onda». ¡El tiempo dirá!