Trabajadores de Antárctica y Kuat exigen horas extras por gran demanda de Guaraná

En Brasil, trabajadores de supermercados, pequeños comercios, lancherías y otros boliches no han encontrado respuesta ante los numerosos pedidos de Guaraná por parte del público extranjero, registrados en los últimos días.
“Não há chance de continuarmos a trabalhar horas extras nessas circunstâncias… pedimos desculpas pelos turistas fanáticos do Guaraná, mas por três reais malucos não vamos nos submeter a essa escravidão; eles bebem soda rende dois vão para a merda”, expresó Joan Nilsson Wanderley Sartore do Nascimento, legendario sindicalista del rubro.
“Não há chance de continuarmos a trabalhar horas extras nessas circunstâncias… pedimos desculpas pelos turistas fanáticos do Guaraná, mas por três reais malucos não vamos nos submeter a essa escravidão; eles bebem soda rende dois vão para a merda”
Joan Nilsson Wanderley Sartore do Nascimento, legendario sindicalista del rubro.
“Nadie quiere tomar esa mierda de Fruki o la Guaraná Brasil, la posta es la Antárctica y, si no, de última, la Kuat… es como que en Uruguay te ofrezcan Mío o Fanny”, declaró a El Cascote News un catarí visitante de la playa Ipanema de Río de Janeiro, quien prefirió permanecer en el anonimato.
“Nadie quiere tomar esa mierda de Fruki o la Guaraná Brasil, la posta es la Antárctica y, si no, de última, la Kuat… es como que en Uruguay te ofrezcan Mío o Fanny”
Declaración de un catarí visitante de la playa Ipanema de Río de Janeiro.
“Uno viene a Brasil y quiere tomar cerveza bien fría, comer pão de queijo y cuando no estás viendo un oguete o una beleza querés una Guaraná, papá… no puede ser que no tengan más», contó por su parte un bañista uruguayo de la playa de Copacabana, visiblemente frustrado ante la notoria ausencia de la bebida en la cidade maravilhosa.
“Ya sé que hay Guaraná en Uruguay; en Uruguay hay maconha también, pero bueno socio, viste cómo es, uno consume productos locales en donde está… acá aparte de falopa brasuca, querés tomar cerveza estúpidamente gelada y Guaraná», declaró el oriundo de Castillos, de nombre Leandro Gastengo, indisimulablemente angustiado.