Vicheting: la tendencia de mirar la pantalla del celular de otro ya tiene nombre

Sabido es que todas las acciones y actividades de este mundo tienen nombre. Desde que nos enteramos de que descansar al más lento de la clase se le llamaba «bullying», nada fue igual. Es por esto que Bear Tolosa, un uruguayo con bastante tiempo libre, le puso nombre a esa maravillosa práctica de ver cómo alguien tiene agendado a su pareja como «aaaamor ❤» o a su suegro como «Gorgue papá Mariana». Esta práctica, pendiente de inscripción en el Registro de marcas y patentes (Tolosa venderá rifas y también remeras para soportar el gasto), ahora se llama «vicheting».
«Metí vicheting en el G rumbo a La Paz» o «con lentes de sol está bueno hacer vicheting» son las nuevas formas que tenemos para mostrarle al mundo que somos capaces de ver cómo un viejo ubicado en «el asiento del bobo» del transporte colectivo sextea con su profesora de canto, mientras vuelve de cobrar la jubilación.
«Metí vicheting en el G rumbo a La Paz», «con lentes de sol está bueno hacer vicheting»
Testimonios empleando el nuevo término.
Está comprobado que la popularidad de las acciones lleva, necesariamente, a ponerles un nombre. Quizás, por eso, orinar en la ducha no tiene nombre.